Los párpados tienen una misión fundamental en la protección del ojo. El segmento anterior ocular, y en especial la córnea, son estructuras muy delicadas que precisan estar en perfectas condiciones para mantener su función. Los párpados son elementos imprescindibles en esa tarea y cualquier alteración en su posición puede comportar una mala protección ocular, alteración la superficie ocular y compromiso visual.

Las principales malposiciones palpebrales son la ptosis del párpado superior (caída del párpado), entropion y ectropion (párpados rotados hacia dentro o hacia fuera), y las malposiciones de las pestañas (triaquiasis).